miércoles, 9 de noviembre de 2011

JAVIER I, REY DE REDONDA

Isla de Redonda


Súbditos de un cuento
El 6 de Julio de 1997, Javier Marías fue coronado rey de Redonda, una isla antillana cuya leyenda se alimenta del juego literario.

Si cogen una carta de navegación del Atlántico y buscan las coordenadas 16º 56’ latitud norte y 62º 21’ longitud este hallarán una isla de tres kilómetros cuadrados, habitada por alcatraces, lagartos y ratas. Es la isla de Redonda, un enclave dejado de la mano de Dios, cercano a las islas antillanas de Montserrat y Antigua y en el que están censados el mayor número de ilustres por metro cuadrado del planeta. Los cineastas Francis Ford Coppola y Pedro Almodóvar, los escritores Arturo Pérez-Reverte y Eduardo Mendoza y el arquitecto Frank O. Gehry, entre otros, comparten aristocracia literaria y domicilio caribeño por la gracia del republicano rey Javier Marías (Javier I), que en julio del 97 fue coronado rey de Redonda, tras la abdicación de Jon Wynne-Tyson (Juan II).
Aunque los lectores de Marías sabían de este reino desde su novela Todas las almas, no fue hasta Negra espalda del tiempo cuando sospecharon que aquel lugar de ficción quizá fuera una realidad y no una boutade del autor. El origen del reino, que según Marías se hereda por "ironía y por letra y nunca por solemnidad y sangre", se remonta a finales del siglo XV, cuando Cristóbal Colón descubrió esta isla en su segundo viaje. Su poca importancia estratégica y comercial hizo que en los siguientes siglos sólo fuera refugio de piratas y contrabandistas, hasta que en 1872 la reina Victoria se la anexionó antes de que lo hiciera el Gobierno de EEUU, interesado en el fosfato de alúmina de su pobre suelo rocoso, producido por el guano de los alcatraces.
El padre del escritor Matthew Phipps Shiel, un banquero de la isla de Montserrat que compró el peñasco el día del nacimiento de su primer varón, reclamó a la reina el título de rey de Redonda. Y la reina aceptó siempre y cuando nunca intentara rebelarse contra el poder colonial. Y así fue como M. P. Shiel, alias Felipe I, se hizo con el trono a los 15 años, y empezó a apuntar la creación de una nobleza intelectual.

PRIMER SUCESOR
John Gawsworth
En 1947, el trono pasó a manos de su amigo y discípulo John Gawsworth (Juan I), quien también se hizo cargo de los derechos de los libros de su maestro. Gawsworth fue el que dio forma a la primera Corte literaria, aunque muchos de los nombramientos se hicieron en los pubs que frecuentaba y con la intención de satisfacer a sus acreedores.
El tercer rey fue John Wynne-Tyson (Juan II), poseedor de los derechos de las obras de los dos anteriores monarcas. Harto del acoso de otros pretendientes al trono, Wynne-Tyson decidió abdicar hace cuatro años, aunque la noticia no se supo hasta casi un año después, ya que su sucesor, Marías, prefirió que apareciera discretamente en Negra espalda del tiempo.
Bandera por XAVIER MARISCAL
Tras recibir la corona, Javier I quiso saber cuáles eran sus obligaciones para con el trono, y pronto descubrió que no tenía de qué preocuparse: "Debía contribuir a mantener viva la memoria de los anteriores reyes y de la leyenda, y heredar y gestionar los derechos de Shiel y Gawsworth". Lo que no presupone que cada rey deba legar al siguiente sus propios derechos literarios. Parece lógico que cuando muera Wynne-Tyson legue los suyos a sus hijas. "Y en cuanto a mí - dice Marías -,quién lo sabe". Lo único cierto es que el próximo rey de Redonda deberá ser escritor, sea o no español. "Ningún patriotismo en este reino", apunta Marías.
Otra potestad real es nombrar a los nobles. Marías se ha decantado por escritores y cineastas con los que ha tenido algún trato. Todos los escogidos han aceptado, salvo Gore Vidal, que adujo, primero, ser republicano, para luego añadir "un poco incongruentemente, que, por familia, se podía considerar que le habría tocado ser ‘Duke de Venise’ en la realidad, no en la redondina ficción", cuenta Marías, quien prefirió "no indagar al respecto".
Trono por RON ARAD
Coppola se puse Duke of Megalópolis (la película que lleva años queriendo hacer) en vez de los Duke of Padrino o Duke of Santino que le ofreció Marías, que no osó a "sugerir Duke of Apocalipsis". Mendoza es Duke of Isla Larga, en referencia a Long Island (vivió muchos años en Nueva York) y a su novela La isla inaudita.
Para ser Duke es indispensable que la obra del candidato escritor esté traducida al inglés o al castellano, según sea su procedencia. Y los cineastas, que sus filmes se conozcan en ambas lenguas, aunque sea con subtítulos. Redonda es un reino bilingüe en consideración a los tres reyes anteriores, que eran británicos. Pero siempre hay excepciones, y Marías ha nombrado a Gehry, autor del Guggenheim de Bilbao, Duke of Nervión, por lo que el arquitecto ha diseñado gratis el Palacio de Redonda.
Pero no es el único que ha diseñado algo para este literario reino. Javier Mariscal ha hecho la bandera; el italiano Massimo Vignelli, el pasaporte; el diseñador de Swatch Alessandro Mendini, la moneda oficial; el israelí Ron Arad ha pensado el trono a partir de su modelo de sofá Big Easy Volume 2; la joyera Helena Rohner se ha encargado de la corona, y el también diseñador Marc Newson ha pensadouna bicicleta como transporte oficial.
Como el reino de Redonda, además de la ficticia, tiene su parte humorística (su antiguo lema es Ride si sapis, es decir, Ríe si sabes), existen muchos nombramientos divertidos, como el de Comisario de Agitación y Propaganda (Juan Cruz) y el de Cónsul en Jerez (Juan Bonilla). "En breve será nombrado un Embajador en el 221B de Baker Street, que, como todo el mundo sabe, es el país de Sherlock Holmes", apunta Marías.

ENEMIGOS Y REVUELTAS
No hay monarquía sin revueltas, y el Reino de Redonda no es una excepción. Los principales ataques provienen de Internet, donde algunos colgados aseguran ser los verdaderos reyes de Redonda (incluso hay uno llamado Bill Gates que no tiene nada que ver con el amo de Microsoft). "La venta de su título, varias veces, por parte de Gawsworth en sus años más borrachos ha dado lugar a estasdisputas dinásticas en las que yo jamás entraré, sólo faltaría", dice Marías.
Monedas por ALESSANDRO MENDINI
Desde dentro también se han vivido situaciones delicadas. "Nada más iniciarse este reinado, dos cargos un tanto ambiciosos, y descontentos por no haber recibido título, anunciaron sus intenciones de iniciar una revuelta de cargos y embajadores contra rey y duques - explica Marías -. No sólo no se vieron secundados, sino que fueron aplacados - o sobornados: haya paz - con apodos o dubbings muy de su gusto para sus respectivos cargos. Con todo, tal vez no me opondría a ceder el título de rey, por ejemplo al señor Coppola, si me lo solicitara. Pero como la deshabitada Isla del Caribe no es un paraíso fiscal al estilo de otras islas cercanas, no parece probable que el futuro nos depare una sangrante revuelta".
Palacio por FRANK O. GEHRY
Según confiesa Javier I, numerosas personas matarían por pertenecer a esta Corte: "Ha habido actrices que han pedido algún título; un señor que, al no haber podido hacerse con no sé qué marquesado español, pedía que se le concediera en Redonda; jóvenes que se ofrecen como espías y bufones". Y si es aconsejable que los desconocidos se abstengan de hacer peticiones, ni aunque vayan acompañadas de sobornos, peor lo tienen los conocidos: "Basta con que las personas por mí conocidas pidan un título o un cargo para que no lo reciban. No me fío de quien manifiesta aspiraciones nobiliarias, aunque sean de ficción", argumenta Marías. Los nombramientos nobiliarios son potestad del rey y Javier I tiene claro quien tiene un lugar reservado en este "club en el exilio cuyos miembros jamás se reúnen" y cuya pertenencia no les cuesta un duro. No así al monarca, que aunque sólo sea por el esfuerzo y el dinero invertido en mantener una leyenda y un juego literario bien merece un "¡Dios salve al rey!".
-                                                                                                                                                                                                                                ---  Óscar López  -

Una ‘familia real’ sin sangre azul
Ésta es la dinastía al completo de los monarcas del Reino de Redonda.
•      Matthew Phipps Shiel (Felipe I): Nacido en 1865 en la isla de Montserrat, fue coronado rey de Redonda en 1880 durante una ceremonia naval organizada por su padre, que compró el islote de Redonda. Enseñó matemáticas en Inglaterra antes de dedicarse a la literatura y despuntó en el género fantástico, con obras como The Purple Cloud, The lost viol y The invisible. Lawrence Durrell (Duke of Cervantes Pequeña) y Henry Miller (Duke of Thuana) figuraron en su corte.
•      Terence Ian Fytton, alias John Gawsworth (Juan I): Este londinense (1912-1970) fue piloto en la segunda guerra mundial, se casó tres veces y murió como un mendigo. Tuvo de asesores a Gerald Durrell (Duke of Angwantibo) y Dylan Thomas (Duke of Gweno). Tras su muerte, Jon Wynne-Tyson le publicó el libro de poemas Toreros y Javier Marías incluyó un cuento suyo,Cómo ocurrió, en su antología Cuentos únicos.
•      Jon Wynne-Tyson (Juan II): Nació en Inglaterra en 1924. Además de editor, publicó cuentos y obras de teatro y la novela So say banana bird. Entre los miembros de su Corte destacan Ronald Hall (Duke of Domingo) y Madeleine Masson (Duches of Mirage).
•      Javier Marías (Javier I): Nació en Madrid en 1951. De joven demostró que además de dar volteretas junto a escritores como Juan Benet, se le daba bien lo de escribir. Ha publicado un sinfín de libros, como El hombre sentimental, Todas las almas y Corazón tan blanco. En su corte figuran Francis F. Coppola (Duke of Megalópolis) y Fernando Savater (Duke of Caronte).

Regia editorial
Desde el año 2000, el Reino de Redonda dispone de su propia editorial (de nombre homónimo) dirigida por Javier Marías, donde se publican entre dos y tres libros al año. Los primeros títulos fueron La mujer de Huguenin, de M. P. Shiel; Bruma, de Richmal Cromptom, y Ehrengard, de Isak Dinesen. En otoño  de 2001 se editó La morada maligna, de Cromptom (con prólogo de Eduardo Mendoza), y la vieja traducción de Marías de La religión de un médico y El enterramiento en urnas, de sir Thomas Browne. Además, la editorial creó en abril de 2001 el Premio de Redonda, que en su primera edición ganó, por su novela Desgracia, J. M. Coetzee, quien recibió un millón de pesetas y ha entrado en la Corte con el título de Duke of Deshonra.

-          El total de los titulos publicados es el siguiente:

•      La mujer de Huguenin de M. P. Shiel
•      Bruma y otros relatos de Richmal Crompton
•      Ehrengard de Isak Dinesen
•      La morada maligna de Richmal Crompton
•      La religión de un médico y El enterramiento en urnas de Sir Thomas Browne
•      El crepúsculo celta y La rosa secreta de W.B. Yeats
•      El monarca del tiempo de Javier Marías
•      El brazo marchito y otros relatos de Thomas Hardy
•      Cuentos únicos edición de Javier Marías
•      El espejo del mar de Joseph Conrad
•      La nube púrpura de M. P. Shiel
•      Viaje de Londres a Génova, a través de Inglaterra, Portugal, España y Francia de Giuseppe Baretti
•      La caída de Constantinopla de Steven Runciman
•      Amor Dure de Vernon Lee
•      Vida de este capitán de Alonso de Contreras
•      Recuerdos de este fusilero de Benjamin Harris
•      Revolución en el jardín de Jorge Ibargüengoitia
•      Las vísperas sicilianas:Una historia del mundo Mediterráneo a finales           del siglo XIII de Steven Runciman
•      Cuentos de las orillas del Rin de Erckmann-Chatrian
•      La expedición de Ursúa y los crímenes de Aguirre de Robert Southey
•      El Coronel Chabert, El verdugo, El elixir de larga vida y La obra                  maestra desconocida de Honoré de Balzac
•      El significado de la traición de Rebecca West                                                                                       

- Los agraciados con el Premio Reino de Redonda han sido los siguientes:

AñoPremiadoNacionalidadProfesiónDucado concedidoObra destacada
2001John Maxwell CoetzeeBandera de Sudáfrica SudáfricaescritorDuque de DeshonraDesgracia
2002John Huxtable ElliottBandera del Reino Unido Reino UnidohistoriadorDuque de SimancasEspaña y su mundo, 1500-1700
2003Claudio MagrisBandera de Italia ItaliaescritorDuque de Segunda ManoEl Danubio
2004Éric RohmerBandera de Francia FranciacineastaDuque de OlallaPauline en la playa
2005Alice MunroBandera de Canadá CanadáescritoraDuquesa de OntarioEl amor de una mujer generosa
2006Ray BradburyBandera de los Estados Unidos Estados UnidosescritorDuque de Diente de LeónFahrenheit 451
2007George SteinerBandera de Francia Franciaensayista ycríticoDuque de GironaAntígonas
2008Umberto EcoBandera de Italia Italiafilósofo yescritorDuque de la Isla del Día de AntesEl nombre de la rosa
2009Marc FumaroliBandera de Francia Franciahistoriador yensayistaDuque de HouyhnhnmsLas abejas y las arañas: las querellas entre los antiguos y los modernos
2010Milan KunderaBandera de la República Checa República ChecaescritorDuque de AmarcordLa insoportable levedad del ser
2011Ian McEwanBandera del Reino Unido Reino UnidoescritorDuque de Perros NegrosChesil Beach



Ha valido la pena

-         Javier Marías,   Julio de 2001.-


Al cabo de cuatro años desde que el escritor y editor inglés Jon Wynne-Tyson abdicara de su título de rey de Redonda en mi favor, harto como estaba de los asedios de curiosos, mitómanos y usurpadores, puedo decir que de momento la prolongación por mi parte de este juego y antigua leyenda me ha traído más diversión que quebraderos de cabeza, por fortuna. Mi primera decisión fue hacer absoluto caso omiso de los tales curiosos, mitómanos, usurpadores y detractores. No hacer, tampoco, el menor caso a las posibles burlas, dado que la mayoría de la gente que ha sabido de esta historia ha entendido bien de qué se trataba y la ha tomado como lo que es: una broma literaria (si bien no una payasada), de buena ley y con un pasado ya bastante legendario. Y así la han visto en particular los muy distinguidos escritores y cineastas que me han acompañado en la pequeña aventura. Ha servido este tiempo, asimismo, para crear una modesta editorial, Reino de Redonda, que no creo que nunca saque más de dos o tres libros al año, y que tal vez no dure mucho: si el Reino entra en bancarrota, se interrumpirán sus publicaciones (que beneficios no creo que vayan a dar jamás), al igual que el premio creado. Algo de tarea suplementaria sí ha traído toda esta historia, pero no agobiante (las ediciones las lleva a cabo una gran profesional, Carmen López). Y, en todo caso, los motivos de diversión han sido los suficientes, tanto para mí como (aún más importante) para los demásredondinos. Y no puedo sino concluir diciendo que hasta ahora el Reino que es "sólo aire y humo y polvo" ha valido la pena.
Javier Marías es escritor y, desde 1997, reina en Redonda como Javier I.

El Periódico de Catalunya
Número 151
6 de julio del 2001

1 comentario:

  1. Muy interesante el listado y tambien la historia de la Isla , muy redonda y divertida .Ya he visto lo que me comentabas sobre los autores que aparecen premiados.Es toda una satisfaccion que algunos hayan sido invitados de nuestro club.

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